Tag Archives:

El tratamiento de RAEE

El tratamiento de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) se inicia en una cinta de recepción de unidades, donde los componentes se dividen en tres grupos principales: tubos de rayos catódicos (CRT), plásticos y carcasas metálicas, y otros componentes.

1. La linea de procesamiento de CRT (Cathode Ray Tube), que contiene sustancias tóxicas, continúa con el desmontaje de bobinas, limpieza del tubo y eliminación de adhesivos y bandas antiexplosión. Posteriormente el tubo se corta con hilo caliente en dos partes: el cono (vidrio con plomo) y la pantalla (vidrio con fósforo). El cono se tritura en un molino y se deriva a una máquina de limpieza en seco, dando como resultado una materia prima secundaria (vidrio triturado limpio). A la pantalla, por su parte, se le retiran los polvos fosforados mediante una aspiradora manual y a continuación también se tritura.

Planta tratamiento RAEE

2. Las carcasas metálicas y los plásticos se desvían a una cinta de clasificación y depuración, donde se retiran los componentes extraños que hayan quedado adheridos, y se separan los materiales ferrosos, las carcasas no ferrosas, y los plásticos según los diferentes polímeros. Los materiales resultantes son compactados posteriormente.

3. El resto de componentes se separan en distintas fracciones: cables, placas de circuitos integrados, fuentes de alimentación, pilas y baterías, motores y micromotores, pantallas de visualización de cristal líquido (LCD) y otros. Los motores, transformadores y otros elementos con núcleo de acero y bobinas de cobre se desmontan con un seccionador hidráulico.

Fuente: https://desarrollosindustriales.com/equipos-y-plantas/raees-procesamiento-de-aparatos-electricos-y-electronicos

Cómo evitar que los RAEE se traten como chatarra

La práctica de recoger o comprar residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) y manipularlos junto con la chatarra metálica es, lamentablemente, muy común en todo el mundo. No es lo deseable porque esta práctica da lugar a problemas ambientales, de salud y de seguridad, ya que los RAEE pueden incluir sustancias peligrosas que deben extraerse y tratarse adecuadamente.

Además, el cumplimiento del objetivo mínimo de recogida de RAEE ha demostrado ser extremadamente difícil para la mayoría de los estados de la Unión Europea debido a la existencia de estos flujos de RAEE no oficiales.

¿Por qué sucede esto?

Principalmente porque los sistemas colectivos de responsabilidad ampliada de los productores (SCRAP) carecen de las competencias y la autoridad para acceder a los datos de las instalaciones. Por lo tanto, no hay casi información fiable sobre las toneladas de RAEE afectadas por estas prácticas. Ni siquiera hay una metodología apropiada y armonizada para reunir datos sobre la cantidad de RAEE que desaparece en el flujo de chatarra metálica.

WEEE-in-Metal-Scrap_Issue-paper_Draft_v7_Final-1

¿Cómo solucionar esto?

➢ Prohibiendo la práctica de comprar y tratar chatarra metálica que contenga RAEE, a no ser que sean tratados y procesados en instalaciones autorizadas.
➢ Inspeccionando y sancionando a las instalaciones que tratan RAEE y solo están autorizadas para tratar chatarra metálica.
➢ Estableciendo procedimientos fiables de recogida de datos para estimar los RAEE contenidos en la chatarra.
➢ Asegurando que los RAEE que siguen estas rutas puedan ser vigilados adecuadamente obligando al sector de la chatarra que informe sobre sus procesos y volúmenes.

Fuente: https://weee-forum.org/wp-content/uploads/2020/10/WEEE-in-Metal-Scrap_Issue-paper_Draft_v7_Final.pdf

¿Cómo acaban en África los residuos electrónicos europeos?

En Agbogbloshie, un suburbio de Accra, la capital de Ghana, decenas de miles de personas desmantelan y queman basura electrónica para ganar 2 o 3 dólares al día. Ghana importa más de 40.000 toneladas de residuos electrónicos cada año y Agbogbloshie es el mayor centro de reciclaje informal del mundo.

Este lugar se encuentra entre los 10 más contaminados del mundo. Varios estudios han evidenciado cómo las personas que se dedican a estas actividades quedan expuestas a sustancias peligrosas y letales. Incluso un reciente informe reveló que los productos químicos peligrosos de esos residuos ya están afectando a toda la cadena alimentaria en Ghana.

Agbogbloshie

Dado que la exportación de residuos electrónicos es ilegal según el Convenio de Basilea, los que se generan en la Unión Europea se camuflan bajo la etiqueta de equipos usados o se introducen en África en vehículos exportados para su reutilización. Los productos enviados no provienen de incineradores o vertederos, sino que normalmente proceden de recogidas informales frente a puntos limpios o plantas de tratamiento, de las calles, a través de Internet o de chatarreros no autorizados.

La razón por la cual las exportaciones ilegales no son retenidas en los puertos europeos es porque apenas pueden controlar e inspeccionar las cantidades ingentes de contenedores que se mueven cada día. Además, no quieren ralentizar sus procesos con esos controles.

Guía rápida de la plataforma RAEE

La nueva plataforma online de gestión de residuos aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) servirá para que gestores (de recogida, almacenamiento o tratamiento), puntos limpios y distribuidores puedan introducir sus datos sobre esos residuos de cara a la administración. A este respecto, la información más importante que facilitaría sería el archivo cronológico de entradas y salidas de residuos, y la memoria anual.

Además, permitirá seguir paso por paso todo el camino que realiza el residuo de principio a fin. La manera de conseguir esta trazabilidad es etiquetar el residuo desde el primer momento, es decir, cuando se genera de forma oficial al «ser llevado a» o «ser recogido por» entidades locales (puntos limpios), gestores o distribuidores.

Para introducir los flujos de residuos (de forma manual en “Grabación por pantalla”) primero hay que registrar la instalación con los usuarios que vayan a utilizar la plataforma. Las entradas y salidas de RAEE está previsto que se lleven a cabo mediante lectura de códigos de barra en etiquetas adosadas a cada unidad y cada contenedor donde se incluya. Según el proceso lógico que siguen los RAEE, los puntos limpios y distribuidores serían los primeros en adosar esas etiquetas y los gestores solo tendrían que leerlas. Pero si, por ejemplo, una empresa lleva RAEE a un gestor, este también podría generar la etiqueta correspondiente en la plataforma. En cuanto a la logística, la plataforma permite además la confirmación de llegada del residuo a su destino.

Por último, las administraciones y los sistemas de responsabilidad ampliada del productor solo podrán consultar la información volcada en la plataforma, nunca modificarla.

Nueva Plataforma

Reutilización de vehículos vs. electrónica (2ª parte)

La remanufactura es un proceso industrial donde se restituye un producto usado a sus condiciones originales, con la garantía de que sea equivalente o mejor que el producto manufacturado inicialmente.

¿Qué productos son susceptibles de ser remanufacturados?

1. El producto debe ser un bien duradero.
2. El producto ha fallado en su funcionalidad.
3. El producto está estandarizado y sus componentes son intercambiables.
4. El valor residual de un producto que ha llegado a su fin de vida es alto.
5. El coste de obtención de un producto que ya no funciona bajo.
6. La tecnología del producto es estable.
7. El cliente es consciente de que hay disponibilidad de productos remanufacturados (hay mercado).
Estas características las cumplen mejor los grandes aparatos eléctricos y electrónicos profesionales y maquinaria industrial.

Induraees. Foto de Rubén García Blázquez

Induraees. Foto de Rubén García Blázquez

Pero para los aparatos domésticos serían necesarias otras estrategias:

- Los fabricantes deberían incentivar que los aparatos vuelvan a ellos, de forma que ellos mismos puedan reacondicionarlos o reciclarlos directamente. Este sería el caso de los llamados “takeback programs” de Samsung o Apple.
- Recogidas municipales en el domicilio (puerta a puerta) de electrodomésticos desechados. De esta forma se evitaría su deterioro.
- Con terceras empresas, ajenas al reciclaje, que pongan en contacto a quien quiere vender y a quien quiere comprar. Un ejemplo sería Wallapop.

La crisis económica ha supuesto un resurgir de las tiendas de segunda mano, que pueden acercar el modelo de reutilización de los vehículos al de los aparatos eléctricos y electrónicos.

Reutilización de vehículos vs. electrónica (1ª parte)

En España, a partir de este año los productores están obligados a reutilizar el 2% de los grandes aparatos eléctricos y electrónicos, convirtiéndose en el primer país de la Unión Europea en introducir objetivos de reutilización en sus leyes (en concreto en el Real Decreto 110/2015). Los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) deberían imitar el modelo circular ya establecido para los vehículos fuera de uso (VFU). Es decir, tendría que existir un amplio mercado de segunda mano que permitiera alargar su vida útil en vez de convertirse en residuos. Sin embargo esto no parece sencillo al darse importantes diferencias entre ambos:

Sectores remanufactura

Sectores que remanufacturan

- La primera es la más evidente: vale mucho más un coche que cualquier aparato, también en una segunda vida.
- Relacionado con lo anterior, los grandes aparatos profesionales (maquinaria industrial) tendrían más posibilidades de optar a una segunda vida.
- La frecuencia de reemplazo es mayor en los aparatos que en los coches.
- Uno de los problemas de la reutilización de aparatos es la recogida separada. En los vehículos sobrepasa el 70% porque se fomenta su traslado al desguace (planta de tratamiento).
- La mala calidad de los productos es otro factor que dificulta la reparación e implica precios bajos en los productos nuevos.

De lo que se trataría, en definitiva, es de conseguir que puedan comprarse aparatos ya utilizados (o sus componentes) tan fácilmente como se va a un desguace.

Contra el negocio ilegal de los residuos

La Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje (FER) ha iniciado en la Comunitat Valenciana un plan piloto para combatir la proliferación de “campas” de acopio de materiales metálicos. Junto con Madrid y Andalucía, estas son las tres comunidades que cuentan con más instalaciones de este tipo. Se trata de chatarrerías sin autorización que, además de incumplir cualquier normativa medioambiental, se nutren de materiales de dudosa procedencia, alimentandoLogo FER el robo y el mercado negro de metales como el cobre o el aluminio.

Los expertos de la FER han desarrollado durante
los tres últimos meses una batida por las tres provincias valencianas en las que han contabilizado cerca de 200 plantas ilegales que gestionan residuos reciclables; o bien cuentan únicamente con autorización “para transportar residuos inertes en una furgoneta y lo aprovechan para almacenar y procesar residuos peligrosos”.

Fuente: Las Provincias