Los móviles y tabletas que se venden en la Unión Europea deberán cumplir ahora con nuevas obligaciones de etiquetado, similar al de electrodomésticos (gama blanca y marrón).
Esta es la información que aporta la nueva etiqueta:
I. un código QR, que enlaza con la información completa del producto aportada por el proveedor
II. la marca comercial
III. el identificador del modelo
IV. la escala de clases de eficiencia energética, de la A a la G
V. indica la eficiencia energética del dispositivo usando un rango de clasificación que va de la A a la G, siendo A el mínimo consumo y G el máximo. La eficiencia energética dependerá de aspectos como el procesador, el tipo de pantalla o la gestión del ciclo de carga.
VI. la autonomía de la batería por ciclo (ENDDevice), en horas y minutos por carga completa de la batería
VII. la resistencia que ofrece el dispositivo ante caídas fortuitas, sobre la base del número de caídas sin deterioro, desde la A a la E, donde la A ofrece la mayor resistencia a caídas y la E la menor del mercado. La nueva normativa establece una resistencia mínima de 45 caídas sin funda ni protector de pantalla. Las tabletas quedan exentas de este requisito de resistencia mínima, por su diseño y la forma en que suelen usarse.
VIII. la clase de reparabilidad. Este índice busca fomentar la economía circular y maximizar la vida útil de móviles y tabletas. Promoviendo el arreglo y reacondicionamiento frente a la compra de nuevos aparatos. Se calcula en función de la facilidad de desmontaje, sustitución de piezas y acceso a la información técnica necesaria para reparar, y vendrá marcado por el mismo sistema de letras que la resistencia a caídas, desde la A a la E.
IX. la autonomía de la batería en ciclos. La nueva normativa establece que las baterías de los móviles y tabletas deben mantener un 80% de su capacidad inicial tras 800 ciclos de carga. Se indica la cantidad de veces que la batería puede cargarse y descargarse (ciclo de carga) antes de empezar a perder capacidad de forma significativa, mostrándote la longevidad estimada de la batería del dispositivo.
X. el índice de protección contra la penetración de partículas y humedad. Con este dato se sabrá la protección que ofrece el dispositivo frente a la entrada de polvo y líquidos siguiendo la certificación ‘Ingress Protection’(IP). Este sistema de certificación está compuesto por dos números: el primero hace referencia a la resistencia frente al polvo, siendo 6 la protección máxima y el segundo mide la resistencia frente al agua, siendo 9 la máxima resistencia. En este sentido, la nueva normativa establece un mínimo de resistencia IP44 para los móviles y para las tabletas un mínimo de resistencia IP40.
XI. el número del Reglamento que regula este nuevo etiquetado, es decir, «2023/1669».