Las buenas prácticas ambientales son medidas sencillas y útiles que pueden adoptar tanto l@s emplead@s como las empresas de cara a mitigar el impacto ambiental de sus actividades. Las más destacadas que se llevan a cabo en Opemed consisten en:
- Medidas de ahorro de agua.
- Consumo racional de energía.
- Reducción de las necesidades de material:
– Imprimir a doble cara, en calidad de borrador y en blanco y negro siempre que sea posible, porque además de evitar el derroche de tinta se facilita la reutilización y el reciclaje del papel.
– Seleccionar el modo “Ahorro de tóner” en impresoras y fotocopiadoras donde exista la opción.
– Reutilizar el papel impreso solo por una cara.
- Mantenimiento preventivo, es decir, conservar en buenas condiciones los materiales y aparatos para alargar su vida útil.
- Criterios de sostenibilidad en el aprovisionamiento de bienes y servicios. Como rechazar productos y envases desechables y priorizar los más duraderos, los que se puedan reparar, actualizar, reutilizar y/o reciclar. También optar por productos hechos a partir de materiales biodegradables o reciclados.
- Gestión de residuos:
– Depositar los residuos generados en el lugar adecuado y asegurarse de que se llevan a gestores autorizados de residuos; con especial atención en caso de ser residuos peligrosos como pilas, tóner o aparatos eléctricos y electrónicos.
– Separar en recipientes etiquetados cada tipo de residuo porque a mayor segregación, más se facilita el reciclaje.
– Manipular los residuos con cuidado para evitar roturas y vertidos. Por ejemplo, empleando envases de nuevos productos para guardar de forma segura los que se han convertido en residuo.
- Promoción del compromiso medioambiental en clientes y usuarios.
Puedes consultar todas nuestras buenas prácticas aquí.